Según nuestra experiencia y el conocimiento adquirido en este tipo de casos, especialmente en el régimen de excepción, los jueces coinciden en que los arraigos son ese vínculo permanente en el tiempo con la familia, el trabajo y el domicilio. Estos arraigos son personalísimos, es decir, nacen de la relación intrínseca que la persona tiene con estos aspectos, y son clave para decidir si una persona puede recibir medidas sustitutivas a la detención.

Audiencia Inicial en el Proceso Penal

En las primeras 72 horas de detención, una de las principales preocupaciones de los familiares es saber qué deben hacer. Al finalizar este período, la persona detenida es presentada ante el juez competente para la lectura de cargos y de sus derechos. Tras esta fase, comienza un nuevo periodo de 72 horas, al final del cual se lleva a cabo la audiencia inicial, donde se evaluarán las medidas sustitutivas a la detención.

Durante estos 6 días, es crucial que los familiares recopilen toda la documentación necesaria para demostrar que el detenido posee arraigos familiar, domiciliario y laboral suficientes para optar por medidas sustitutivas en lugar de la detención. En caso de régimen de excepción, el plazo para la audiencia inicial se extiende a 15 días. Para asegurar la mejor representación, nuestro equipo de abogados y colaboradores especializados está preparado para brindarte la asesoría necesaria y aumentar las posibilidades de recuperar la libertad del detenido.

  • Arraigo Familiar

Dentro de la sociedad salvadoreña, la familia es la base fundamental del Estado, por lo que su protección es prioritaria. En el proceso penal, es esencial demostrar el arraigo familiar presentando la documentación que acredite la existencia de familiares directos y el vínculo afectivo con ellos. Este tipo de arraigo puede ser clave para justificar la aplicación de medidas sustitutivas en lugar de la detención.

  • Arraigo Laboral

El arraigo laboral en el proceso penal se refiere a la demostración de cómo la persona genera ingresos de manera lícita para sostenerse a sí misma y a su familia. Se deben presentar pruebas documentales suficientes que acrediten la relación laboral y la estabilidad en el empleo. Testimonios de compañeros de trabajo, jefes o clientes pueden ser útiles para reforzar este tipo de arraigo y demostrar que el imputado tiene un vínculo sólido con su ocupación.

  • Arraigo Domiciliar

El arraigo domiciliario en el proceso penal implica demostrar la permanencia en un lugar de residencia determinado. A través de la documentación pertinente, se debe probar que la persona ha residido en un domicilio específico durante un tiempo significativo, lo cual puede ayudar a reducir el peligro de fuga y facilitar la aplicación de medidas sustitutivas a la detención.

En conclusión El Código Procesal Penal de El Salvador establece que la audiencia inicial es el momento adecuado para presentar los arraigos en el proceso penal. Durante esta fase, se analiza si la persona cuenta con los arraigos suficientes para minimizar el riesgo de fuga (Periculum in mora). Nuestra experiencia en estos casos nos ha permitido identificar que un arraigo sólido y bien documentado puede ser decisivo para que el juez considere medidas alternativas a la detención. Bajo nuestra asesoría, evaluamos los requisitos y documentos necesarios en cada caso particular para presentar la mejor defensa posible y proteger uno de los derechos más importantes: la libertad.

Si necesitas más información o asesoría legal sobre cómo presentar los arraigos en el proceso penal, nuestro equipo de abogados especializados está disponible para ayudarte a proteger tu derecho a la libertad.